Vida matrimonial.
Ha cumplido dieciocho años, es hermosa, laboriosa, caritativa y alegre. La alegría que dan la fe y la esperanza...
A esta edad Rita se casa con Pablo Fernando ofreciéndole su corazón.
Rita pone oración, cariño y amor. Va dejando caer sobre el endurecido corazón de su esposo, gotas de dulzura, paciencia, prudencia, amabilidad y servicio.
Esta actitud desconcertante para Fernando logra cambiar su corazón.
Meditación...
Dios quiso darnos en ella el ejemplo admirable de hija y ahora de esposa. ¡Cuántas virtudes para imitar de nuestra santa! La paciencia, la fortaleza, la fe, la esperanza, el servicio. Esparció a su alrededor el aroma del amor de Dios.
¿Estamos dispuestos a ser buenos, colaboradores y alegres con nuestros hermanos, padres, compañeros, maestros para cambiar las cosas a nuestro alrededor, y que todo se llene con la fragancia del amor de Dios.
Rita, dulce esposa, protege a los matrimonios,
especialmente a papá y mamá.
Rita, esposa atribulada, te pedimos por ellos
para que sepan llevar con fortaleza
las dificultades que le toca vivir.
Que como tú puedan llenar de amor,
comprensión diálogo y servicio a sus familias.
Amén.
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