Amor al Rosario.

 

Rita era muy dedicada a la oración y al servicio de Dios. Ella concurría a una iglesia de Rocaporrena diariamente a Misa. A los doce años tomó su primera comunión.
Rita apreciaba al Rosario y el Crucifijo, que para ella era el retrato del Amor de Dios.

Meditación...

¡Qué bello es verla así tan niña, tan pequeña y con tanta devoción y entrega a Dios!
Sabés que vos también podés hacerlo? Rezando con esmero y muy atento todos los días en la escuela, en tu casa con tu familia pero siempre poniendo tus intenciones a los pies de Nuestro Señor, y nunca teniendo vergüenza de alabar y agradecer a Cristo.
Rita te dice:  "No te alejes de la oración y de las buenas obras".

Rita enséñanos a ser perseverantes en la oración desde niños

para que podamos alcanzar como vos

el amor Divino y misericordioso de Nuestro Señor.

Amén.